Señala Alberto Martín, en el catálogo de la exposición, que en la obra de Carlos Cánovas se percibe“una constante preocupación por cuestiones comola naturaleza del documento fotográfico, el proceso de elaboración formal de la imagen, la luz, o un asunto recurrente para él y que atraviesa su obra, como es la cuestión de la distancia con respecto a lo fotografiado, una distancia no solo física, sino especialmente emocional, y que de algún modo entronca también con el delicado y ambiguo asunto de la belleza, o si se prefiere de la poética, que no obstante, y no es una posición fácil ni frecuente en las últimas décadas, afronta con claridad y rotundidad”.
